miércoles, 17 de septiembre de 2008

Esperaré


(Picasso. Mujer de brazos cruzados)

Azul… Líneas en el mar… qué profundo y sin domar…
La canción estaba de fondo. A menudo la tenía de fondo en mis cascos, mientras paseaba por la ciudad. Temor, amor de quemar, pon tus manos a volar…
No sé quien me dijo que tenía que ver con la adicción a las drogas… prefería redirigir la letra a otras cosas, a otras personas.
Tu mirada era de color pardo. Oscuro; mirada profunda y siempre intrigante.
Se cruzó con mi mirada hace demasiado tiempo… la veía al cerrar los ojos, imaginándote todavía, pensando si el rostro se había transformado, de niño a adulto.
Y hace mucho que no había reconocido en los rostros de los demás esa mirada. Antes, hace tanto tiempo de ello, buscaba esos ojos en el metro, en el autobús, en el coche que me adelantaba, en el que adelantaba yo. Hace tiempo que no busco. Un día me dijiste que si desaparecías de mi vida, sería de manera definitiva. No querías segundas partes. No querías volver a reencontrarme para descubrir que éramos dos personas distintas de las que nos reconocíamos a través de esa mirada.
La despedida fue por teléfono… la distancia entre nosotros era aún mayor que la que nos separaba la línea quebradiza que nos mantenía con una voz metálica una conversación de adioses.
Y tras colgar, mi mirada cerró la puerta, pero las lágrimas salían por las esquinas mojando mi rostro, y corriendo el rimel que todavía no me había quitado.
Lloré; tanto que, desde entonces, mis lágrimas están secas.
Y pasaron los días, los meses y los años… tu teléfono no lo descolgaba nadie, tu dirección estaba vacante. Habías dejado el trabajo.
El adiós era definitivo.
Y con el tiempo, dejé de mirar las miradas…
Gente… hay ángeles entre nosotros…la siguiente canción de mi mptres. Me encanta Presuntos.
El paseo se hacía agradable. Miraba el cielo frío de Madrid, en mi paseo por el retiro. El jardín inglés estaba increíble.
Me senté en el banco, en ese que siempre me sentaba.
Sola. Como siempre.
Vaya… Esperaré, también de Presuntos, esperaré a que sientas lo mismo que yo, a que a la luna la mires del mismo color…
Otros amantes, otros colores, sabores, miradas… no sé que tenía aquella mirada que ya no busco, y que no encuentro.
Igual alguien sabe que esa mirada es mía, y me busca.
Esperaré…

6 comentarios:

Mencía dijo...

Esperaré ... me encanta esa canción ... hice una entrada hace no mucho con ella .. haciendola mía ... no esperando en el sentido de actitud de espera ... yo espero ... en el sentido de esperanza.

Besos

Pepe del Montgó dijo...

Igual uno va olvidando y rebuscandose a si mismo, mirando y bajando la mirada para verse a si mismo. Cuando parece que te has encontrado, te dices adios de repente. Pero yo no lo hago con Presuntos, no.

Miguel dijo...

Parece Mencía,que tu esperar es una actitud de movimiento, no de sentarte en un banco.
Un besazo.

Miguel dijo...

Uno nunca sabe cuando la mirada del otro te reconocerá, o cuando tú propia mirada se verá en el espejo.
Un abrazo Pepe

Unknown dijo...

Te regalo mis miradas y mis parpadeos, ya sabes que el amor perfecto es aquel que va de una mirada a un parpadeo.....

Miguel dijo...

Gracias, Ana Belén por el regalo de tus miradas. Quizá me acercen al amor perfecto.